Existen infecciones que pueden ser más graves durante el embarazo y pueden incrementar el riesgo de aborto involuntario, parto prematuro o causar defectos de nacimiento. Afortunadamente, muchas infecciones de alto riesgo pueden evitarse si a las mujeres se les administran las vacunas recomendadas antes de intentar embarazarse.
Si estas embarazada, se recomienda recibir dos vacunas durante el embarazo:
- La vacuna contra la influenza (gripe).
- La Tdap (vacuna contra tétano, difteria y tos ferina).
Durante el embarazo, los cambios en el funcionamiento del sistema inmunitario, el corazón y los pulmones aumentan sus probabilidades de que se enferme gravemente si contrae la influenza. La influenza es una enfermedad respiratoria contagiosa que puede ser grave y que puede causar la hospitalización e incluso la muerte. La vacuna contra la influenza sí es segura para las mujeres embarazadas. Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) recomiendan la vacuna de la influenza para las mujeres embarazadas en cualquier trimestre del embarazo durante la temporada de gripe.
El beneficio de vacunarse contra la influenza durante el embarazo es que le pasará anticuerpos a su bebé. Los niños menores de 6 meses son demasiado pequeños para recibir una vacuna contra la influenza, pero están en alto riesgo de ser hospitalizados por la enfermedad. Si se vacuna durante el embarazo, su bebé nacerá con una protección contra la influenza que puede durar varios meses. También hay alguna evidencia de que las mujeres embarazadas que se vacunan pueden tener menos probabilidades de tener parto prematuro.
Adicionalmente, se recomienda la Tdap (vacuna contra tétano, difteria y tos ferina) durante el embarazo para las mujeres que no la han recibido anteriormente (es decir, más de 10 años desde la Td (vacuna contra el tétano y la difteria) anterior), durante el tercer trimestre o parte final del segundo (después de la semana 20 de gestación.
Así mismo, todas las vacunas pueden administrarse de forma segura durante la lactancia.
La tosferina también es una enfermedad grave para su bebé. Si su bebé se enferma de tosferina, puede tener graves complicaciones y hasta morir por esta enfermedad. Cerca de la mitad de los bebés menores de 1 año que contraen la tosferina son hospitalizados. Cuando usted recibe la vacuna contra la tosferina durante el embarazo, su cuerpo crea anticuerpos y los pasa al bebé antes de nacer. Estos anticuerpos le proporcionan a su bebé algo de protección a corto plazo contra la enfermedad al inicio de su vida. Además, usted estará protegida por lo que tendrá menos probabilidades de pasarle la tosferina a su bebé.
Antes de quedarse embarazada
Si está pensando en tener un bebé, quizás necesite ponerse algunas vacunas antes de quedar embarazada. Debido a que su cuerpo le lleva tiempo desarrollar protección contra la enfermedad (inmunidad) después de la vacunación podría tener que vacunarse varias semanas antes de quedar embarazada. Algunas enfermedades que se pueden prevenir con vacunas, como la rubéola, pueden causar complicaciones graves para su bebé. Si contrae la rubéola durante el embarazo, su bebé podría nacer con defectos de nacimiento o tener otras complicaciones. Si no tiene inmunidad contra la rubéola, entonces debe vacunarse antes de quedar embarazada.